Las torres de asedio

Las torres de asedio tienen una data muy antigua, donde sus primeros usos masivos se dieron por parte de Alejandro Magno y los romanos.

Era una maquinaria de gran coste por su construcción y desplazamiento, ya que debía ser construida con tipos de madera especial en cada sección. Vigas de maderas resistentes y duras y para los pisos y paredes maderas más ligeras.

Su movimiento al acercarse hacia las murallas era bastante lento, teniéndose datos de que en ciertos asedios su avance en una distancia de dos estadios de fútbol tomo dos meses. El terreno por el cual pasaba debía ser parejo y duro, de manera que la torre no se estancara ni perdiera el equilibrio, por lo que los defensores lanzaban agua y otros materiales que hicieran que la torre se estancaran. Normalmente las torres eran tiradas por animales hacia las murallas, aunque estos al estar muy cerca de los defensores podrían ser atacados y asustarse huyendo, por lo que también se usaba la fuerza humana para moverlas, haciéndolas muy lentas.

Las formas que tenían los defensores de detener una torre era a través de proyectiles incendiarios o de mayor peso, minando el terreno por el que avanzaba la torre o prenderle fuego apenas este a una corta distancia, contra esto se les cubría con pieles humedas o con placas de hierro u otro metal disponible y llevaban agua para apagar posible focos de incendio.

Además de su efectividad para asaltar murallas, tenia un impacto psicológico sobre los defensores que en algunos casos nunca habían visto ese tipo de artilugios de guerra, por lo que se asustaban y decaía su moral. Mientras a los atacantes les daba una mayor confianza y seguridad de la victoria.

Las torres al acercarse a las murallas llevaban a los soldados ya dentro, por lo que al desplegarse estas los soldados salían directamente al ataque, y generalmente por ser los primeros en entrar y enfrentar la mayor resistencia no sobrevivían, por lo que en las primeras oleadas de infantería en la torres se usaba a las tropas mas baratas (milicia con poco entrenamiento) o de las cuales se podía prescindir.